Es evidente que todos trabajamos mejor en una oficina limpia y ordenada. Pero además, si tenemos un negocio que visitan clientes y proveedores a diario, es muy importante ofrecer una buena imagen. La cuestión es que no basta con barrer el suelo y quitar el polvo de vez en cuando, sino que cada rincón debe mantenerse impecable si queremos transmitir profesionalidad a todos nuestros clientes y podamos disfrutar de un lugar limpio y saludable para el trabajo.
Es cierto que podemos hacer la limpieza de oficina nosotros mismos, pero contratar un servicio de limpieza profesional nos ahorrará mucho tiempo que podremos invertir en otras tareas. En cualquier caso, a continuación te explicamos cuáles son los pasos que se deben dar a la hora de limpiar una oficina.
Puntos claves a limpiar en una oficina
- Retira todo lo que tengas sobre el escritorio y tira todo lo que ya no necesites a la basura.
- Cambia las bolsas de basura de la papelera y coloca unas nuevas.
- Coge un trapo ligeramente humedecido y limpia los muebles. Ten en cuenta que, en función del tipo de material del que esté hecho cada mueble, tendrás que utilizar un producto de limpieza diferente. Para los objetos delicados, te recomendamos usar el plumero.
- Limpia las huellas y el polvo de tus dispositivos electrónicos con mucho cuidado.
- Limpia los asientos de la oficina con un producto, a ser posible natural, para evitar dañar el material del que están hechos.
- Sabemos que limpiar los cristales es muy importante para dejar pasar la luz y dar una buena imagen, pero muchas veces nos olvidamos de las persianas y de los marcos que también son importantes. Empieza por las persianas, continúa por el marco y termina con los cristales. De lo contrario, dejarás manchas en los marcos.
- Si en tu oficina hay una cocina, es fundamental que limpies cada día la encimera para eliminar las manchas que hayan podido quedar en ellas.
- La limpieza y desinfección del baño también es una tarea imprescindible, ya que en estos lugares es donde se acumulan mayor cantidad de bacterias.
- Por último, limpia el suelo de la oficina. Las superficies y materiales deben ser tratados con mucho cuidado y dedicación para evitar su desgaste y la acumulación de suciedad que terminarán perjudicándolos con el tiempo. Un buen profesional sabe perfectamente identificar de qué tipo de suelo se trata y qué procedimiento de limpieza requiere sin estropear la calidad del material.