El Covid-19 nos ha hecho ser más conscientes de lo importante que es una buena limpieza y desinfección de las superficies, sean del tipo que sean. Por este motivo, muchas personas cuentan con la ayuda y servicios de empresas de limpieza como Serlingo para llevar a cabo el saneamiento de sus lugares de trabajo.
Los elementos que forman parte de estos sitios también se deben desinfectar. Un claro ejemplo son los teclados de los ordenadores y de otros aparatos típicos tanto en oficinas, como en supermercados y otros negocios. A continuación, les daremos algunas claves para sanearlo de forma efectiva, práctica y rápida.
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Pasos para limpiar y desinfectar un teclado contra el Covid-19
La importancia de limpiar un teclado es tan imperativa porque su uso implica el contacto con la piel de nuestras manos. Por este motivo, de la misma forma que nos limpiamos las manos varias veces al día, también debemos mantener las superficies con las que contactamos limpias y saneadas.
Para limpiar los teclados hay que seguir los siguientes cuatro sencillos y rápidos pasos:
Apagar el ordenador o dispositivo y desconectar el teclado
Tanto si vamos a limpiar un teclado inalámbrico, como uno que esté conectado a un dispositivo, es necesario apagar el ordenador o aparato al que dé servicio. De esta forma, evitaremos que el utensilio se pueda ver perjudicado por la manipulación y limpieza.
Sacudir el teclado para quitar suciedad de su interior
Para llevar a cabo este paso, hay que dar la vuelta al teclado y zarandearlo o golpearlo sobre una superficie y de forma muy delicada. Si nos decidimos por golpearlo suavemente sobre una superficie, es recomendable poner un trapo o almohadilla. Así evitaremos perjudicar el teclado.
Usar aire comprimido para extraer la suciedad sobrante del teclado
El aire comprimido nos permitirá extraer suciedad seca o más fijada en la superficie del teclado. Para ello, hay que procurar mantener la pistola de aire comprimido a unos 1,3 centímetros de distancia del teclado.
Limpiar las teclas y la superficie del teclado con alcohol isopropílico
Una vez hemos extraído toda la suciedad del interior del teclado, hay que limpiar bien las teclas para evitar que las bacterias sigan existiendo sobre la superficie. Para ello, utilizaremos alcohol isopropílico.
El producto elegido debe tener un 70% de este alcohol en su composición y nunca se debe aplicar directamente sobre la superficie del teclado, pues puede ser corrosiva. Por este motivo, recomendamos aplicarlo mediante un paño de microfibra.
A parte de estos consejos, también recomendamos que los usuarios saneen sus manos de forma habitual, ya sea limpiándolas con agua y jabón o con gel hidroalcohólico. Asimismo, las oficinas deben sanearse de forma habitual.
