El servicio de limpieza de comunidades de vecinos es una labor de vital importancia para mejorar la imagen que las zonas comunes de la finca proyectan a los propios residentes y a las personas que la visitan. Por eso, es fundamental mantener y preservar la buena limpieza de la comunidad de vecinos para que no se termine deteriorando por el paso del tiempo y por el uso. Lo cual puede terminar devaluando el valor de las viviendas cuando se quieren alquilar o vender. Y es que a nadie le gusta encontrarse un edificio en mal estado, ya sea de mantenimiento o de limpieza.
¿Por qué contratar una empresa de limpieza de comunidades de vecinos?
Por lo general, las comunidades que contratan servicios de limpieza para sus instalaciones suelen ser las que cuentan con más de 10 viviendas. Aunque también hay algunas más pequeñas que recurren a este tipo de servicios para no tener que preocuparse de organizar este tipo de tareas entre ellos mismos. De esta forma, se favorece una mejor convivencia entre los propietarios.
En algunas comunidades de vecinos las labores de limpieza y mantenimiento son responsabilidad del portero. Pero cuando esta figura no existe, lo más habitual es contratar una empresa profesional que se encargue de la limpieza de comunidades para que se ocupe de mantener en perfectas condiciones de orden y limpieza los espacios comunes.
Normalmente, los servicios de limpieza para comunidades de vecinos incluyen la limpieza de la acera de la comunidad, del parking, del terrado, de los patios interiores, de los pasillos, de los ascensores, etc. En definitiva, todos aquellos elementos comunes de los que hacen uso los residentes. Y las empresas contratadas realizan tanto limpiezas convencionales como otras más especializadas, con técnicas y productos especiales, en aquellas zonas que lo requieran, como la limpieza de cristales en altura o las zonas de aparcamiento, en las que suele acumularse grasa de los coches.
Principales tareas de la limpieza de las comunidades de vecinos
Aunque cada comunidad de vecinos es diferente y presenta una extensión y unas características distintas, existen determinadas labores habituales que suelen llevarse a cabo en las zonas comunes de una finca, como la limpieza de los portales, las escaleras y los garajes.
- El portal y las escaleras
La parte del portal, tanto interna como externa, y las escaleras son elementos que deben ser barridos y fregados a diario, ya que son los que más polvo y suciedad acumulan por el tránsito de los vecinos. Incluyéndose aquí también los rellanos, los porches, los zaguanes, los cristales, los espejos y las barandillas.
- Ascensores y montacargas
Del mismo modo, los ascensores y montacargas también acumulan mucha suciedad y bacterias. Los techos, paredes, espejos y suelos deben ser limpiados con frecuencia, ya que se usan a diario.
- Patios interiores
Según la extensión y el diseño, los patios interiores requerirán de u tipo de limpieza u otro. En algunas comunidades tienen jardines, pero en otros solamente hay baldosas. En el primer caso habrá que contratar un jardinero, ya que se necesita un mantenimiento constante. Y si se tiene piscina, se necesitará contratar los servicios de una empresa especializada.