Las funciones de un conserje van mucho más allá de lo que la mayoría de la gente pensamos. Las tareas de un conserje van desde el acompañamientos de las personas que entran al portal hasta encargarse del correo de los inquilinos del edificio.
De hecho, el servicio de conserjería es un trabajo de lo más completo para el que el profesional debe contar con conocimientos en distintas áreas.
Normalmente, las labores de un conserje exigen que la persona que ostenta este cargo tenga nociones de pintura, fontanería y albañilería. Además, debe ser una persona puntual, organizada y metódica, y tener don de gentes y generar confianza, ya que son muchas las personas que cada día entran a la oficina o a la comunidad de vecinos. A continuación te explicamos cuáles son todas las funciones de un conserje.
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Vigilar los accesos
Todos sabemos que las responsabilidades de un conserje es estar atento a quién entra y quién sale del edificio, ayudando a llegar a su destino a aquellas personas que pregunten. Pero además, debe mantener las llaves de locales, viviendas, oficinas y zonas comunes a buen recaudo para proporcionarlas a quien las necesite en caso de emergencia.
Encargarse del correo
Aunque la mayor parte de los edificios cuentan con buzones, el conserje sigue jugando un papel esencial en este sentido, ya que si un mensajero trae un paquete y la persona no se encuentra en casa, podrá recibirlo y dárselo más tarde.
Limpieza
En algunos casos, el servicio de consejería también incluye tareas de limpieza de los ascensores, los pasillos, los despachos, etc. Cada día se ocupan de que todas las zonas del edificio luzcan relucientes, lo cual no es poco en aquellos lugares en los que hay un gran tránsito de personas.
Sacar la basura
Una de las mayores comodidades de contar con servicio de conserjería en el edificio en el que vives o trabajas es la de sacar la basura. De esta forma, ni los empleados ni los residentes tienen que sacarla, sino que podrán colocarla en la puerta y desaparecerá como por arte de magia.
En estos casos, se suelen establecer unos turnos para poner la basura en la puerta y que el conserje la lleve hasta los contenedores de la calle, de manera que no esté demasiado tiempo fuera generando malos olores.
Tareas de mantenimiento
El conserje también se encarga de cambiar una bombilla rota, de hacer retoques de pintura y de contactar con los profesionales adecuados en el caso de que las instalaciones de gas, fontanería o electricidad se estropeen.
Cuidar el jardín y la piscina
Si la comunidad de vecinos cuenta con jardín o piscina, el conserje puede encargarse de su mantenimiento, lo cual es fundamental para que todos los propietarios puedan disfrutar de estas instalaciones cuando llega el buen tiempo.
Regular la calefacción central
En aquellos edificios que la tienen las funciones del conserje pueden requerir que se ocupe de encender, apagar y regular la calefacción, debiendo encontrar el equilibrio para agradar a todos los vecinos, lo cual no es tarea sencilla.
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